500 maratones en 500 días: Entrevista con Ricardo Abad

Ricardo Abad: Récord mundial de maratones en días consecutivos
Foto: www.ricardoabad.com

Ricardo Abad Martínez (8 de enero de 1971, Tafalla, Navarra) es un deportista español que acaba de cumplir una hazaña que demuestra la asombrosa capacidad del ser humano cuando se propone una meta y pone todo su esfuerzo en cumplirla: correr 500 maratones en 500 días consecutivos. De esta forma, el corredor navarro recupera el récord mundial que ostentó con 150 maratones, hasta que el belga Stefaan Engels se dedicó a recorrer los 42.195 km. cada uno de los 365 días del 2010.

“Riki” como es llamado este atleta de 1.89 mt. y 81.5 kg, no es un improvisado en la materia. Por el contrario, ha dedicado prácticamente toda su vida a la práctica del deporte, primero en el ciclismo y luego en las carreras de fondo, con una particularidad: desde el primer momento las metas se las fijó él mismo. Así fue con su primera travesía de 4,000 km. en bicicleta por Estados Unidos, y con cada una de sus siguientes experiencias hasta llegar a la actual, que aún no termina porque Ricardo ha doblado el reto hasta los 1,000 maratones consecutivos, siempre que consiga el apoyo necesario para ello (al momento de esta nota ha completado 528 días como consta en su blog, donde día a día deja constancia de su vivencia, de la ruta recorrida y del tiempo que le tomó completarla).

Este reto de Ricardo, que comenzó el primero de octubre de 2010, va acompañado de una causa benéfica, con la recaudación de donaciones para ANFAS, la “Asociación Navarra en favor de las personas con discapacidad intelectual”. 

En medio de su exigente rutina diaria y entre maratones, trabajo y familia, Ricardo dedicó un momento para contarnos su experiencia, la cuál constituye un auténtico ejemplo de perseverancia y superación.

1 de octubre de 2010: el primer día
Foto: www.ricardoabad.com

Pregunta: ¿Desde cuándo te nace la pasión por el deporte? ¿Algún deportista en particular que tuvieras de referencia?

Respuesta: Siempre me gustó el deporte, practiqué el ciclismo desde pequeño. Un referente fue Miguel Indurain (ciclista español que fue el primero en ganar cinco veces consecutivas el Tour de France) y una persona por la que siento una gran admiración es Lance Armstrong por su capacidad de sufrimiento. Corriendo a pie, Haile Gebrselassie (atleta etíope considerado el mejor corredor de larga distancia, Premio Príncipe de Asturias al deporte 2011)

P: En el año 2005 y luego de consumar travesías que te llevaron a Estados Unidos y Australia, entre otros lugares, guardas la bicicleta y te calzas las zapatillas para empezar a correr ¿Qué motivó el cambio?

R: Es simple, necesitaba un cambio, la competición ciclista ya no me llenaba. Una curiosidad es que ese momento coincidió con el nacimiento de mi hija Ainhoa. 

P: Has escrito que para tí correr, más que un deporte, es una filosofía de vida y que te gusta huir de las carreras convencionales y crear tus propios retos y desafíos. ¿Qué es lo que te motiva a ser diferente?

R: Me gusta ser yo mismo y no fijarme en nada ni en nadie. Es muy gratificante hacer cosas únicas, idear proyectos y retos y poder cumplirlos. En una carrera eres uno entre muchos, aquí en cambio es tu prueba, es tu reto.

P: ¿Cómo nace esta iniciativa de los 500 maratones en 500 días?

R: En 2009 ya realicé 150 maratones en 150 días y en aquél momento hubiera podido seguir, pero tenía lanzado el reto de dar la vuelta a la Península así que no pude y me puse a buscar la financiación para hacer el año completo en 2011. Pero el belga Engels se adelantó y entonces decidí llevar el reto más allá.

Día 366: se establece el récord mundial
Foto: www.ricardoabad.com

 P: ¿Como te preparaste para esta meta?

R: No llevo una preparación, como de todo, no me pierdo ninguna comida. En realidad llevo cinco años corriendo sin parar, salgo de una y me meto en otra. Pero cada día estoy más fuerte, sobre todo mentalmente; estos retos me están aportando una gran capacidad de sufrimiento y un saber estar en los malos momentos que antes no tenía.

P: ¿Cómo es un día “normal” en la vida de Ricardo Abad desde hace 500 días?

R: Es un ritmo de vida muy estresante, casi cuatro horas de carrera a pie todos los días sin descanso, ocho horas en el trabajo donde soy responsable de planta y después las tareas de casa y actualizar la web. Vamos que te metes en la cama muerto. Lo que más paso es sueño, intento recuperar horas de descanso el fin de semana. Cuento con mi familia, mi mujer Ivana que siempre me ha apoyado y es un gran pilar en mis retos, lo mismo que mi niña de seis años, Ainhoa.

P: En 500 días tienes que haberte encontrado con todo tipo de dificultades ¿Cuáles han sido las más comunes?

R: He pasado de todo, gripe, fiebre, catarro. Son días difíciles en los que tienes que estar muy motivado para salvarlos, cuesta un mundo calzarte las zapatillas. En cuanto a lesiones, no las he tenido, quizás algún pinchazo en gemelos y alguna sobrecarga, pero poca cosa.

P: ¿Cuál fue tu momento más difícil durante estos 500 días?

R: La defunción de mi padre y los demás días puntuales donde no estaba bien de salud.

P: Si te pido elegir los tres momentos más agradables ¿Cuáles serían?

R: El primer día fue muy especial, me temblaban las piernas nada más de pensarlo. El segundo fue el día que batí el record con el maratón 366 en Madrid. El tercero, el maratón 500 en Barcelona, fue muy emotiva. Son numerosos momentos, también están aquellos cuando se unen personas en la ruta; es muy bonito correr acompañado, se agradece mucho la compañía, más cuando pasas tantas horas en solitario.

P: Has utilizado 25 pares de zapatillas y seguimos contando.

R: Las cambio cada 21 días, unos 890 kilómetros, es la vida normal de unas zapatillas.

P: Cuéntamos tus sensaciones de los días previos al día 500 y de ese día en particular. ¿Creció la ansiedad por que arribe el día? ¿Surgió algún temor que estando tan cerca algo pudiera pasar?

R: Sí, siempre los días previos vas con mucho cuidado, te da mucho miedo de que algo te pueda suceder y que todo el trabajo realizado se vea perdido. El del maratón 500 fue un día muy bonito y muy emotivo, crucé la línea de meta de la mano de mi hija Ainhoa.

12 de febrero de 2012: maratón 500
Ricardo llega a la meta con su hija Ainhoa
Foto: www.ricardoabad.com

P: Ya rompiste el récord Guiness de maratones consecutivas. Y tras completar los 500 días has anunciado tu intención de seguir corriendo hasta completar los 1,000 maratones consecutivos, esfuerzo en el que estás en este momento. ¿Porqué decides doblar la apuesta?

R: Es el momento, he llegado muy bien y quiero dejar el listón aún más alto si cabe. Además estoy buscando patrocinios para poder continuar el reto en los cinco continentes. Todo dependerá del apoyo que pueda conseguir.  

P: Has recibido numerosos reconocimientos e inclusive estuviste nominado al Premio Príncipe de Asturias al deporte de 2009. Tu historia es un ejemplo de perseverancia.

R: Para mí es un bonito premio que mi lucha de superación en busca de los límites del cuerpo humano sirva de estímulo y de impulso a muchas personas para motivarse y superarse tanto en el ámbito del deporte como en su día a día.

Joe Girardi y un hermoso gesto de primavera

Joe Girardi
Foto Nick Laham - Getty Images

Steven Smith era un apasionado seguidor de los New York Yankees que a sus 24 años soñaba con ser comentarista deportivo. En tanto concretaba sus planes, aprovechó la aparición de Twitter para hacerse conocido por sus constantes intercambios con diversos periodistas, especialmente beat writers (cronistas que dan seguimiento exclusivo a un equipo) de los Yankees. Enamorado de la vida, de sus Yankees y de Madison Ainsley -una muchacha que curiosamente es seguidora de los Mets, el otro equipo de béisbol de New York-, Steven vio truncados sus sueños una noche de diciembre de 2010 en un accidente de camino a su casa, el mismo día que Cliff Lee rechazaba la oferta de los Bombarderos del Bronx para firmar por los Phillies de Philadelphia. Por esas cosas de la vida, fue precisamente el silencio en su cuenta de twitter @stevensmithy respecto de esa noticia lo que dio el primer indicio que algo había ocurrido, lo que lamentablemente se confirmó cuando Steven nunca llegó a casa, como relata Madison en su blog personal.

El sábado 3 de marzo de 2012 los Yankees realizaban prácticas de bateo previo a su encuentro de pre temporada contra los Phillies cuando su técnico, Joe Girardi, divisó un cartel en la tribuna que decía "Please Remember Steven E. Smith". Mark Feinsand (@BloggingBombers), periodista que cubre a los Yankees para el NY Daily News, relata que Girardi, se acercó a quien portaba el cartel, que no era otro que Matt Smith, el padre de Steven, dialogó con él y le firmó el mismo. Cuando Matt todavía no salía de su sorpresa, Girardi lo invitó a ingresar al campo y ver la práctica a su lado, detrás de la caja de bateo, lugar donde además fue saludado por los jugadores del equipo. Como si no fuera suficiente con la experiencia, el técnico de los Yankees le pidió el cartel a Smith y prometió devolvérselo posteriormente firmado por todo el equipo.

El señor Smith se fue a su casa meditando la ironía de haber participado de una experiencia por la cual su hijo habría dado lo que sea por vivirla, y agradecido por la amabilidad y generosidad de Girardi, quien con su gesto obsequió un bálsamo ante el dolor de los padres de Steven, y expuso la calidad humana detrás del responsable del equipo más ganador del béisbol de Grandes Ligas.

En unos días Girardi comenzará a ser evaluado por cada movimiento que haga en la dirección de los Mulos del Bronx, recibiendo críticas y elogios según dictaminen los resultados. Mientras tanto, como ser humano, se comportó como un campeón. Gracias por regalarlos esta historia Joe.

Allez les Bleus… también en español

Ballet azul en La Rosaleda
Foto: AP

Miércoles futbolero con cantidad interminable de partidos amistosos entre seleccionados con una última oportunidad para prepararse antes de la Eurocopa en el caso de los europeos, o de volver a la actividad previo al reinicio de eliminatorias en el caso de casi todos los demás países. Tuvimos la oportunidad de ver cuatro de esos partidos: el Inglaterra – Holanda que concluyó con la victoria naranja por 3 a 2 en las postrimerías del partido, el Suiza – Argentina que también pintaba para empate hasta que Messi decidió resolverlo con un hat-trick, y los dos juegos a los que dedicaremos esta nota: Alemania 1 – Francia 2 y España 5 – Venezuela 0.

Malouda celebra su gol en el triunfo francés ante Alemania en Bremen
Foto: AP

En el partido disputado en Bremen nos dispusimos a ver al equipo alemán –gran favorito a ganar la Eurocopa a celebrarse este año- y con lo que nos encontramos fue con una sólida actuación del equipo francés.

Los Bleus, que vistieron de blanco en estos días donde el marketing domina hasta los uniformes a utilizar (solo eso explica el blanco de Francia y el verde con el que jugó Alemania, cuando sus uniformes clásicos, azul, blanco y rojo por un lado; blanco, negro y blanco por el otro, son inconfundibles), anduvieron sólidos en el sector defensivo y desarrollaron un astuto planteamiento para aprovechar cada descuido del equipo alemán, de la mano de un inspirado Samir Nasri en la creación y apariciones a las espaldas de los defensores germanos, de Cabaye, Valbuena y el inacabable Ribéry en el primer tiempo, y de Malouda –autor de uno de los goles- y Menez en el segundo. A falta de Benzemá, lesionado, el técnico Laurent Blanc volvió a darle la oportunidad en la delantera al joven Olivier Giroud, delantero del Montpellier, que en su tercer partido con la selección anotó su primer gol y expuso su caso de cara a ganarse un lugar en el equipo que irá a disputar la Eurocopa.

Alemania llegó con bajas notables como las de Schweinsteiger, Gotze o Per Mertesacker, sin perjuicio de lo cual presentó un equipo con una sólida columna vertebral sustentada en Hummels, los madridistas Khedira y Ozil y el veterano Klose, que durante el primer tiempo dejo esbozos del sello de este equipo alemán: juego vertical y velocísimos contragolpes que esta vez no fueron concretados al momento del disparo final. Sólo cuando se jugaban los minutos agregados por el árbitro y la victoria francesa era irremediable, Cacau, pudo anotar el gol de honor.

Más allá del resultado, Alemania sigue siendo favorita para la Eurocopa, aunque deberá pulir las distracciones defensivas que mostró, especialmente teniendo en cuenta que competirá en el Grupo B nada menos que frente a Holanda, Portugal y Dinamarca; Francia, por su parte, continúa dando señales de recuperación de la mano de Blanca, luego del fracaso del Mundial del 2010; el equipo es otro, los resultados positivos se repiten, y la afición gala empieza a ver con ojos más positivos las posibilidades de su equipo.

Soldado volvió con un hat-trick
Foto: Jorge Guerrero - Getty Images

 El azul también brilló en La Rosaleda en un auténtica exhibición del seleccionado español, que estrenó uniforme alternativo de ese color ante la “vinotinto” venezolana. La camiseta no era la única novedad en España: era la primera vez los dos delanteros que siempre eran una fija en las convocatorias de Vicente del Bosque estaban ausentes: David Villa, recuperándose de la fractura que sufrió en el Mundial de Clubes jugando por el Barcelona, y Fernando Torres, que pasa por el peor momento de su carrera en el Chelsea del fútbol inglés. Ante esas bajas, del Bosque llamó finalmente a Roberto Soldado, el delantero que borda una muy buena campaña en el Valencia, al cuál le bastaron 45 minutos para poner pie y medio en el equipo que irá a disputar la Eurocopa.

Venezuela solamente fue rival durante media hora. El tiempo que demoró España en debilitarlo de la mano de un Iniesta al que le encanta ofrecer grandes actuaciones con su selección, y un Silva que desde hace rato es titular indiscutible, en su selección, el Manchester City, y en cualquier equipo donde juegue. Faltando ocho minutos para concluir la primera etapa, Iniesta definió con exquisitez en un déjà vu del gol que le hizo a Chile en el Mundial del 2010, y par de minutos después una combinación entre Cesc y Silva concluye con un golazo de este ultimo.

Para cuando se jugaban diez minutos de la segunda etapa, España ya ganaba 4 a 0 cortesía de dos goles de Soldado -uno de ellos tras una estupenda combinación de Cesc, Silva y Cazorla-, que pudo anotar uno más diez minutos después, cuando falló un penal que motivó la expulsion de Amorebieta el jugador del Bilbao que optó por jugar por Venezuela a pesar de haber sido campeón europeo sub-19 con España. Soldado tuvo revancha al final del partido, coronando su vuelta a la selección con un hat-trick.

Venezuela vuelve con la maleta llena de goles, pero con sus opciones intactas en las eliminatorias sudamericanas que se reanudan en junio. Sin duda su técnico Farías sacará lecciones de esta experiencia para seguir en la lucha por una histórica primera clasificación a un mundial. Para el campeón del mundo por su parte fue una tarde inmejorable, no solo por el resultado y la exhibición futbolística brindada, sino porque entre otras cosas, pudo confirmar que tiene en Jordi Alba un lateral que se asienta en la titularidad dada por su técnico, en Soldado una alternativa más arriba, y en Iker Muníain, que debutó con su selección, la simbolización de un futuro recambio de calidad tras esta generación campeona de todo. Tras las dudas que pudieron generarse en recientes amistosos, España dejó en claro que sigue siendo el rival a derrotar en el torneo que se disputará en Polonia y Ucrania.

Miércoles futbolero. Parece que falta mucho y sin embargo cuando menos nos demos cuenta, estaremos disfrutando de más eliminatorias mundialistas y de una Eurocopa que promete y entusiasma. Que llegue pronto.